El Sur, desde la distancia.
Para mí, que no soy de monte, que nací y me crié en ciudad, el Sur siempre fue algo exótico, lejano… Un lugar al que ir de vacaciones a torrarse al sol y huir del urbanita día a día. Una tierra desaparecida bajo altos y feos bloques de hormigón pegaditos al mar. Ése es el Sur en el que muchos pensamos desde el Norte, desde la ciudad y la comodidad de nuestro hogar. Así viví mucho tiempo de mi vida, creyendo en ese Sur turístico sin pasado y sin futuro, ignorante de la existencia de otro sur totalmente diferente, nuevo…